La NASA tiene la intención de seguir operando la Estación Espacial Internacional (ISS por sus siglas en inglés) hasta fines de 2030, después de lo cual la ISS se estrellará en una parte remota del Océano Pacífico conocida como Point Nemo, según los planes recientemente publicados que describen el fatídico futuro de la instalación.
Lanzado en 2000, el laboratorio espacial ha orbitado 227 millas náuticas sobre la Tierra con más de 200 astronautas de 19 países diferentes disfrutando de períodos a bordo, lo que representa una presencia humana continua en el espacio.
La NASA afirmó que las plataformas espaciales operadas comercialmente reemplazarán a la Estación Espacial Internacional como un lugar en donde se pueda fomentar la colaboración y la investigación científica.
“El sector privado es técnica y financieramente capaz de desarrollar y operar destinos comerciales de órbita terrestre baja, con la asistencia de la NASA. Esperamos compartir nuestras lecciones aprendidas y experiencia operativa con el sector privado para ayudarlos a desarrollar destinos seguros, confiables y rentables. destinos efectivos en el espacio", expresó Phil McAlister, director de espacio comercial en la sede de la NASA en un comunicado.
El cementerio espacial
En el Informe de Transición de la Estación Espacial Internacional, la NASA informó que el plan era que la Estación Espacial Internacional caiga a la Tierra en un área conocida como Área Deshabitada Oceánica del Pacífico Sur, "Punto Nemo". También se detalla en el texto que su presupuesto estimado asumía que la salida de órbita ocurrirá en enero de 2031.
Nombrado en honor al marinero submarino en la novela de Julio Verne "Veinte mil leguas de viaje submarino", Point Nemo es el punto del océano que está más alejado de la tierra y ha sido un cementerio acuático para muchas otras naves espaciales.
El área está aproximadamente a 3,000 millas de la costa este de Nueva Zelanda y a 2,000 millas al norte de la Antártida y se estima que las naciones que realizan actividades espaciales como Estados Unidos, Rusia, Japón y los países europeos han hundido allí más de 263 piezas de desechos espaciales desde 1971.
El informe también reveló que la ISS realizaría maniobras de empuje que garantizarían una "entrada segura en la atmósfera".
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