El multimillonario y casi nuevo dueño de Twitter, Elon Musk, acaba de dejar congelado al mundo con el anuncio de que rescindirá su acuerdo por 44 mil millones de dólares para la compra de la red social del pajarito.
En una misiva enviada presentada ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés), el magnate de origen sudafricano anunció que no seguirá con la compra bajo el argumento de un incumplimiento de varias disposiciones del acuerdo, principalmente, se refiere al tema de los bots.
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Musk insistió en varias ocasiones en las dudas que tenía sobre si la red social estaba informando con precisión la cantidad de robots de spam en el servicio, según un informe. Al respecto, Twitter siempre aseguró que los bots de spam representaban menos de 5% de su base total de usuarios, pero nunca entregó documentación que lo probara.
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El tema de las cuentas falsas en las redes sociales no es un asunto menor, pues los anunciantes se fijan en la cantidad de usuarios en las redes sociales para decidir dónde invertirán su dinero.
Una vez que se dio el anuncio, casi de forma inmediata, las acciones de la red social cayeron hasta un 6% en los movimientos después del cierre y los directivos anunciaron que emprenderán acciones legales.
Twitter no cumplió condiciones de Musk para continuar con el acuerdo
A principios de junio, Musk ya amenazaba con no continuar con la compra de Twitter, pues acusaba a la red social de vulnerar su acuerdo por no facilitar los datos sobre los bots. Por lo que el lunes, 6 de junio, envió una tercera carta a Twitter en la que reiteraba sus exigencias de conocer la cantidad de cuentas falsas y bots presentes actualmente en la red social. Hasta entonces, su equipo ya había enviado cartas con el mismo motivo el 25 y el 31 de mayo.
"En este punto, Musk cree que Twitter se niega de manera transparente a cumplir con sus obligaciones en virtud del acuerdo de fusión, lo que genera más sospechas de que la empresa está reteniendo los datos solicitados debido a la preocupación por lo que descubrirá el propio análisis de Musk de esos datos", comentaron entonces los abogados del empresario.
Por lo que el CEO de Tesla y SpaceX impuso un ultimátum a Twitter y le acusó de "resistir activamente y frustrar sus derechos de información" como futuro propietario, así como de no respetar las obligaciones del acuerdo de compra al que llegaron ambas partes.
En ese entonces anunció en su tercera carta que se reserva todos los derechos (derivados del acuerdo de compra), incluido su derecho a no consumar la transacción y su derecho a rescindir el acuerdo de fusión. Tal parece que el hombre más rico del mundo está cumpliendo su amenaza.
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