El pasado 17 de junio, los investigadores Fernanda Brollo, Era Dabla-Norris, Ruud de Mooij, Daniel Garcia-Macia, Tibor Hanappi, Li Liu y Anh Dinh Minh Nguyen del Fondo Monetario Internacional (FMI) publicaron un informe (nota de discusión) en torno a la forma en que las políticas de estado, en concreto la fiscal, podrían amplificar las ganancias derivadas de la inteligencia artificial generativa (IA Gen).
Dado que se trata de un documento extenso pero muy interesante, me permito presentarle las que a mi juicio son sus principales aportaciones; no todas ellas libres de controversia.
La IA Gen representa un salto transformador en la capacidad tecnológica, con el potencial de mejorar significativamente la productividad en varios sectores. Su capacidad para generar contenido, diseñar productos y simular interacciones humanas la posiciona como una herramienta poderosa para la innovación y el aumento en la eficiencia.
Sin embargo, el rápido avance y despliegue de la IA Gen también implican desafíos importantes, particularmente en relación con las disrupciones en el mercado laboral y el aumento de la desigualdad económica.
El potencial económico de la IA Gen
La IA Gen remodelará los paisajes económicos automatizando una amplia gama de tareas que anteriormente se creían exclusivas de la inteligencia humana.
Esto incluye no solo tareas rutinarias, sino también funciones cognitivas más complejas. La adopción generalizada de la IA Gen podría conducir a importantes aumentos de productividad, mejorando el crecimiento económico y potencialmente reduciendo los costos de bienes y servicios. Sin embargo, no está claro que estos beneficios apliquen de manera equitativa.
Disrupciones en el mercado laboral
Una de las preocupaciones más apremiantes derivadas del despliegue de la IA Gen es su impacto sobre los mercados laborales. Los precedentes que tenemos en las revoluciones tecnológicas anteriores, como la Revolución Industrial y la aparición de las computadoras sugieren que, aunque la tecnología puede crear nuevos empleos, también tiende a desplazar los existentes.
La IA Gen podría acentuar estas tendencias automatizando tareas realizadas por trabajadores tanto de cuello azul como de cuello blanco. Los trabajos que implican tareas rutinarias y repetitivas son particularmente vulnerables, pero incluso los trabajos cognitivos que requieren de mayores capacidades están en riesgo:
- Sustitución de trabajos rutinarios: Los trabajos que implican tareas manuales o cognitivas rutinarias, como el trabajo en la línea de ensamble o la captura de datos, son altamente susceptibles a la automatización por la IA Gen. El desplazamiento de estas tareas podría llevar a pérdidas significativas de empleos en sectores que dependen en gran medida de tales tareas.
- Impacto en trabajos cognitivos: los trabajos cognitivos, como la investigación en precedentes legales, el análisis financiero y ciertos tipos de diagnóstico médico también están en riesgo. Las capacidades de IA Gen en el procesamiento del lenguaje natural y el análisis de datos significan que incluso estos puestos de mayor habilidad pueden enfrentarse a una automatización importante.
- Aumento de la desigualdad económica: la adopción y los beneficios desiguales de la IA Gen pueden conducir a una mayor desigualdad económica. Mientras que las empresas y los trabajadores que se adapten y aprovechen la IA Gen pueden obtener ventajas y ganancias importantes, aquellos que no lo hagan pueden enfrentar pérdidas de empleo y disminución de salarios.
- Polarización salarial: a medida que la IA Gen automatiza tareas rutinarias, los trabajadores que realizan estos trabajos pueden enfrentar recortes salariales o pérdidas de empleo. Por el contrario, los trabajadores con habilidades que complementan la IA Gen, como aquellos involucrados en el desarrollo y gestión de IA Gen, pueden experimentar aumentos salariales importantes.
- Capital vs. trabajo: la IA Gen tiende a favorecer el capital sobre el trabajo, ya que las empresas que pueden permitirse invertir en tecnologías de IA probablemente cosechen la mayoría de las ganancias en productividad. Este cambio puede conducir a una mayor proporción de ingresos para los propietarios del capital a expensas del trabajo.
El papel de las políticas fiscales
Las políticas fiscales son cruciales para gestionar la transición a una economía impulsada por la IA. Pueden ayudar a mitigar los efectos adversos de la IA Gen sobre los mercados laborales y la desigualdad, al tiempo que promueven un crecimiento inclusivo y la distribución equitativa de los beneficios de la IA.
Las áreas clave donde las políticas fiscales pueden desempeñar un papel incluyen la protección social, la reforma tributaria y el apoyo a la innovación inclusiva en IA.
Considerando el espacio de esta columna, la próxima semana continuaremos con las sugerencias y conclusiones de los investigadores del FMI en torno a nuestro tema de hoy. Si usted desea adelantarse, puede encontrar el informe que hemos resumido en esta página.
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Por Emilio Carrillo, abogado especializado en temas de financiamiento, tecnología y M&A. X: @ecarrillop; página web: pcga.mx. Las opiniones expresadas son personales del autor y no constituyen recomendaciones de inversión; las inversiones en tecnologías novedosas son de muy alto riesgo y cabe la posibilidad de que todos los recursos destinados a ellas podrían perderse.